Burgos, ciudad castellana, oasis al norte de la meseta, descanso en el Camino de Santiago; paraíso donde el verde extiende su gama más variada; tierra de noblezas, de amigos para siempre, tierras de Cid - y Cid significa "Señor".
       Dice el lema de la ciudad: "Burgos no te dejará frío"; y así es, el calor de su corazón irradia primaveras eternas. A través del dedo de las agujas de su catedral, toda su mirada apunta al cielo, todo su deseo es albergar la fecundidad del Espíritu Santo.
       Así, con una llamada silenciosa, orante, junto a Sta.Mª la Mayor, en el Cenáculo de una ciudad llena de historia y de hijos; allá por el año 76, quiso su Cid, derramarse en una lluvia de dones y carismas, conquistar los corazones como el único Señor y Dador de Vida. Y, un pequeño grupo de jovenes con nuestro querido padre Alejandro, iniciaron la R.C.C. en estos lares.
       Han pasado más de 30 años, y desde el primer grupo Emmanuel, han surgido seis células orantes que alaban al Señor, viven la gratuidad de su amor sanador ,y participan en la vida parroquial y diocesana con unas vidas alegres y renovadas.
 
       Encontrarás en estas páginas vida y calor;  el día a día de los grupos de Burgos, información y experiencias de unos hermanos pobres y pequeños, pero en la manos de Dios.
       Es nuestro deseo que la visita a toda la página web os sirvan en vuestra vida de oración personal y comunitaria,;  se trata de navegar mar a dentro, hacia donde el Señor quiera,y siempre, siempre
para su gloria. DIOS OS BENDIGA.