Cinco de seis son las victorias que ha obtenido el Óbila Club de Basket en la pretemporada que viene realizando durante el mes de septiembre. La última víctima fue el Oviedo, equipo que es novedad en la LEB Bronce. El partido no fue demasiado brillante con los abulenses jugando a ráfagas con momentos puntuales de acierto pero otros en los que funcionaban con dificultad, haciendo aguas la defensa, faceta en la que habían brillado en choques anteriores, y errando numerosos tiros libres.

Recuperando a Dreke Bouldin, Nacho Elizagaray y Paul Willians –éste último debutaba ante la afición verderona-, pero con la baja de Tomás Ramón, el entrenador local pudo disponer de ocho efectivos de categoría sénior, uno menos que su rival que se presentó en Ávila con nueve. El primer cuarto fue bastante igualado (22-19) para marcharse con ventaja de once al descanso el conjunto anfitrión (49-37) gracias a la buena actuación de Sergio Sánchez y Bouldin, los más atinados sobre la canasta rival.

La salida en la reanudación fue bastante floja por parte del Óbila que vio conjugado parte del electrónico que le era favorable, si bien los ovetenses no supieron romper definitivamente la dificultosa construcción del juego que realizaba el conjunto local, menos fresco en ideas que en ocasiones anteriores. No obstante, los puntos a favor de los de Antonio Cano bastaron como para mantener a cierta distancia a un rival que terminó cayendo al final del último cuarto debido a las acciones puntuales del equipo abulense.