La página www.solobasket.com ha realizado un exhaustivo análisis a la actuación de los 16 equipos que conforman la LEB Bronce de baloncesto durante la primera parte de la temporada. De forma pormenorizada, Pablo Romero examina uno a uno a todos los equipos, entre los que no falta el Óbila Club de Basket. Recogemos aquí, los aspectos más interesantes del informe y concretamente lo que se dice del equipo abulense.

La LEB Bronce disputó la pasada campaña 2007/08 su primera edición, y si algo llamó la atención de los espectadores fue la igualdad reinante durante todo el campeonato. A lo largo de las 32 jornadas disputadas cualquier equipo podía sorprender a cualquiera, y una vez finalizada la liga regular, tan sólo 4 victorias separaron al Habitacle Badajoz (último descendido), del Cajasur de Córdoba (equipo que cerró la zona de play off).

En su segunda edición, se han disputado ya 96 encuentros, lo que supone el 40% de la competición, y a falta de 3 jornadas para cerrarse la primera vuelta y conocerse el nombre de los dos clasificados que disputarán la Copa, la situación se repite, y tan sólo 4 victorias separan el 14º puesto de la segunda plaza de la tabla.

Sobre el Óbila, Solobasket comenta que el conjunto abulense encabeza el grupo de 4 equipos que presentan un igualado balance entre victorias y derrotas. Quizás se esperaba más del equipo de Antonio Cano, pero lo cierto es que el inicio de competición no ha sido muy placentero para ellos.

La que sobre el papel es la mejor plantilla de la liga ha demostrado a lo largo de las primeras jornadas una importante falta de acoplamiento entre sus jugadores. El debut liguero supuso la primera derrota de la temporada, llegó a domicilio y por apenas un punto en la pista del AD Molina (81-80). Tan sólo siete días más tarde, el conjunto sumó la primera victoria, también por un solo punto ante Menorca y en su propia pista, pero a partir de aquí, el equipo comenzó a mostrar una gran irregularidad siendo capaz de lo peor (caer con el colista Mérida), y de lo mejor (vender a Guadalajara y Alcazar). Tras caer con el líder Tíjola, llegaron dos nuevas victorias ante Huelva y Oviedo, pero los últimos 4 partidos trajeron 3 derrotas ya que los de Antonio Cano sólo fueron capaces de vencer a un Cantabria al que privaron de colocarse líder, para perder con Navalcarnero, Valdemoro y ADT.

Pese a este mal balance, el equipo de Ávila es el tercer máximo anotador de la competición con un promedio de 82´4 puntos por noche, pero arrastra el lastre de contar con la quinta peor defensa del campeonato con 80´3 puntos encajados. El equipo no tiene suerte de cara al aro, es el sexto que más tiros de dos puntos lanza por partido, pero ocupa el 10º lugar en efectividad con apenas un 52%; sus jugadores interiores palian esta falta de acierto haciéndose fuertes en la faceta reboteadora donde son el cuarto mejor equipo con 33´1 rechaces por encuentro. Además, los abulenses lideran la tabla de equipo que más tapones coloca con 38, siendo el conjunto que menos faltas realiza por encuentro con apenas 18´25.

En el apartado individual, Dreke Bouldin es el auténtico dueño y señor no sólo del equipo sino de todo el campeonato del que es jugador más valorado con 25´25 tantos por encuentro y siendo el único que ha superado los 300 puntos de valoración. El ala-pívot norteamericano es el mejor anotador del equipo y ha sido incluido en el quinteto ideal Solobasket de los meses de octubre y diciembre para ser el MVP absoluto de la liga en el mes de diciembre. Por su parte, su compatriota Paul Williams es el encargado de aportar los rebotes, con prácticamente 9 por encuentro, para ser el cuarto mejor capturador del torneo. En cuanto a los nacionales, Sergio Sánchez es el más valorado de un grupo que debe de ir obligatoriamente a más de aquí al final de liga.