El Óbila logró en el C.U.M. Carlos Sastre una importantísima victoria por 85-74 frente a Fundación Adepal Alcázar. Los de Antonio Cano vieron rota en la jornada anterior su racha de seis encuentros consecutivos ganando y el rival manchego venía a poner a prueba al equipo abulense, que salió con buena nota del choque gracias a la gran labor realizada por sus hombres de perímetro, con un magnífico encuentro de Nacho Elizagaray, bien secundado por Víctor Chuan, Federico Castelló y Sergio Sánchez.

 En esta ocasión no fueron Paul Willians y Dreke Bouldin los más decisivos, ya que estuvieron muy marcados por sus contrarios. Pese a ello el ala-pívot tejano fue el segundo jugador más valorado del encuentro por la gran cantidad de rebotes capturados, hasta 15, catorce de ellos defensivos. El triunfo sitúa al Óbila en segunda posición, a una victoria del Alerta Cantabria, vencedor en la cancha de Valdemoro, y con los mismos 13 triunfos que Molina, derrotado en Huelva.

En el primer cuarto y con marcajes individuales por ambos equipos, empezó imponiéndose el conjunto de Alcázar de San Juan con un parcial inicial de 0-6. Los pívots verderones tenían muchas dificultades para anotar, de modo que los puntos hubo que buscarlos desde lejos. Las distancias en el electrónico fueron mínimas y así los primeros diez minutos finalizaban con un resultado de 23-22.

Luego llegaría en el segundo parcial el momento en que los abulenses empezaran a creer en sí mismos y a distanciarse de su rival con un parcial inicial de 7-0, que desgastaba al veterano grupo de jugadores dirigidos por Miguel Ángel Martín, dejándoles algo tocados por la velocidad impresa por el conjunto local. El Óbila crecía en su juego y lograba situarse al descanso con seis puntos arriba (40-34), teniendo a Willians ya con tres personales.

La salida desde los vestuarios fue fulgurante por parte local anotando desde la línea de 6,25 no sólo Elizagaray sino Chuan y Sergio. El acierto verderón era extraordinario y la falta de precisión de Adepal importante. Con una docena de puntos de ventaja y afilando el arma del contraataque, el Óbila tenía la ocasión de matar el partido, pero su contrario no se dejaba porque le respondía con la misma moneda con tiros atinados de tres de Francisco Javier Martín y Quique Bárcenas, dos hombres curtidos en mil batallas, ayudados en la dirección por el no menos veterano Rafa Monclova. No contaron con la aportación de su único americano J.C. Mathis, muy difuminado en el partido y que no estuvo demasiado tiempo en la cancha, mientras que en el banquillo hubo momentos donde no hacía más que increpar a su propio entrenador, Miguel Ángel Martín.

En el período decisivo final, iniciado con un marcador de 65-53 a favor del Óbila, Adepal Alcázar buscó la remontada y a lo más que llegaron los manchegos es a quedarse a nueve puntos de distancia. Pero estaba más que cantado que la victoria no se iba a escapar a los chicos de Antonio Cano, que con tranquilidad supieron llevar el tempo de los minutos que restaban, encargándose de impedir cualquier atisbo de sorpresa.

RESULTADOS, ESTADÍSTICAS Y CLASIFICACIÓN DE LA LEB BRONCE

Pulsa en el enlace superior para acceder