El Óbila Club de Basket logró una victoria ante el Navalcarnero muy sufrida, tras la disputa de una prórroga. Los verderones estuvieron a punto de caer por primera vez en el nuevo C.U.M. Carlos Sastre y sólo los errores de Navalcarnero en el lanzamiento de dos tiros libres a falta de cuatro segundos para la finalización de la prolongación, antecedida por un triple de Federico Castelló y una jugada de dos más uno de Paul Willians, salvó de una derrota a los de Antonio Cano, que no hicieron un buen encuentro.

La excelente actuación del base visitante Óscar Herrero, dirigiendo el partido que les interesaba hizo que saltasen las alarmas de un Óbila muy irregular a lo largo del choque, que se caracterizó por un mal inicio local. Así llegó un parcial de 2-6, pero el acierto desde la línea de 6,25 de los jugadores abulenses facilitó la remontada y progresivamente fueron cogiendo distancia en el electrónico para terminar el primer período con un marcador favorable de 27-19.

En el segundo cuarto, se produjo la debacle verderona, cuya renta quedó reducida a un punto (28-29). No estaban muy acertados los locales ni en defensa ni en ataque, de modo que Navalcarnero se hizo con este período, permitiendo recuperar las diferencias en el electrónico e incluso poniéndose por delante (36-39).

Tras el descanso, las posibilidades de poner tierra de por medio del Óbila parecieron más factibles por la velocidad impresa a su juego. Pero no pudo despegarse del equipo madrileño en el marcador en demasía pese a que Willians ganaba la partida en la zona a los pívots forasteros, resurgido después de haber estado desaparecido en la primera parte. Un parcial de 12-4 hizo que el cuadro abulense afrontase el último cuarto con una ventaja de tres puntos (59-56).

El supuesto último período fue poco brillante en los momentos iniciales. Ninguno de los dos equipos anotó durante bastante tiempo. Después se produjo un intercambio de canastas en uno y otro aro que culminó con un contraataque rematado con un espectacular mate de Dreke Bouldin que ponía el resultado en cinco puntos por encima al Óbila (77-72), cuando restaban cuarenta segundos para la conclusión. Navalcarnero supo manejar mejor la situación que le era adversa y se aprovechó del fallo de Bouldin en los tiros libres y se acercó a tres con un triple. Al límite de tiempo, Castelló no acertó a cortar a su rival y Chris Owens forzó la prórroga.

En la prolongación, un Navalcarnero crecido llevó el ritmo del partido, con el Óbila teniendo muchas dificultades para encontrar el hueco por donde tirar. Los de Antonio Cano se emplearon con mayor intensidad en defensa para que el cuadro visitante no ampliase su ventaja de cinco puntos. Willians conseguía una canasta de dos y además acertaba en el tiro libre adicional que conllevó su jugada. De esa forma, los abulenses se quedaban a uno (90-91) y con posibilidades de ganar. La mano certera de Castelló hacía un triple que colocaba el resultado en 93-91, el que sería definitivo, con 15 segundos por delante hasta la finalización. En la última jugada, el Navalcarnero recibió una falta personal, sin convertir ninguno de los dos tiros libres. Con la pelota en posesión local y cuatro segundos de tiempo, no hubo oportunidad para más y el triunfo se quedó en casa.

Después de los resultados habidos esta jornada, con derrota del líder Alerta Cantabria, al que se enfrentará el Óbila la próxima semana, el conjunto abulense es tercero en la clasificación, a un triunfo del primero y del segundo (Molina) y con uno de ventaja sobre cuarto y quinto, Archena y Promobys, respectivamente. Vienen los partidos decisivos para confirmar la clasificación para los play off, con unas perspectivas que dejan un tanto en el aire dicha clasificación por el bajón en el juego experimentado por el equipo verderón en las últimas jornadas -al que no son ajenos jugadores vitales como Sergio Sánchez y Dreke Bouldin- y la escasez de rotación en el banquillo.

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