A pesar de que la crisis económica puede mediatizarlo todo, y precisamente para reducir costes, la tan apuntada fusión entre las ligas LEB Plata y Bronce parece que está totalmente encarada salvo que haya alguna sorpresa. La Federación Española de Baloncesto ha sido la principal promotora y ha ido recabando quejas y sugerencias de los diferentes clubs.

Todo indica que la nueva LEB Plata se llevará a cabo, dado que el proyecto será llevado a la asamblea federativa del próximo día 30 de este mes por una comisión delegada del mismo ente, y sería tremendamente extraño que una “mesa de trabajo” promovida por la misma organización viera tumbada su propuesta.

Además, en el último congreso Adecco LEB se tanteó por última vez a los clubs, buscando el consenso.

Dos grupos geográficos

La idea general en principio es la de hacer dos grupos de 12 equipos cada uno, unidos por proximidad geográfica, en los que se enfrentarían todos contra todos ida y vuelta en 22 jornadas en una primera fase.

Los seis primeros y los seis segundos de cada grupo jugarían una segunda fase para ascender y descender, respectivamente, todos contra todos en los que se contabilizarían los resultados obtenidos entre ellos en la primera fase. De ahí se disputarían otros doce partidos, que sumados a los 22 de la primera, darían un total de 34 jornadas.

Tras esta segunda fase saldría, posiblemente un play-off para ascender o descender, aunque este último extremo se debería confirmar.

Habrá cupos de jugadores

Otra de las iniciativas que se debe aprobar es la de modificar el actual sistema de confección de plantillas. Hasta ahora, los clubs LEB podían tener en sus filas a dos extra-comunitarios y el resto sin límite entre nacionales o comunitarios. La modificación se basa en el siguiente criterio: dos extracomunitarios, dos comunitarios, un jugador procedente de ex-colonias europeas y seis nacionales. La intención que se busca es la de potenciar las canteras.