Segunda rueda de presentaciones de los nuevos jugadores que han recalado esta temporada en el Óbila Club de Basket para la aventura de la LEB Bronce de baloncesto. En esta ocasión han sido el argentino Facundo Madoz, el vasco Sergio Sánchez y el gallego Chema González. Los tres han manifestado estar contentos en los días que llevan residiendo en la capital abulense, teniendo como primer objetivo lograr que la plantilla sea una piña.

El base-escolta Facundo Madoz llega por primera vez a España y se estrenará en Ávila en el baloncesto europeo. Este joven deportista de 21 años cedido por el Baloncesto León, mide 1,88 m. y surgió en la cantera del Náutico de Zárate. Ahora estaba jugando en el Obras Sanitarias de Buenos Aires en la primera liga argentina. No tiene problemas respecto a qué posición ocupar sobre la cancha. “Voy en el puesto que el equipo necesite”, manifestaba Madoz, siendo “el juego rápido uno de mis fuertes, aunque tengo que mejorar muchas cosas”. Al igual que luego confesarían el resto de sus compañeros, respecto al trabajo realizado en la pretemporada, decía “estar un poco cansado físicamente”.

Sergio Sánchez fue el segundo jugador en comparecer ante los medios de comunicación. Este alero de 22 años y 1,98 m. de altura, comenzó en la cantera del Bilbao Basket, pasando después por Santurtzi y Hellín. Desde hace tiempo estaba siendo seguido por Óscar Lata y ha tenido que ser en el Óbila donde se juntasen ambos en el mismo barco deportivo. “Me he decantado por Ávila porque me habían hablado muy bien de aquí y del club”, declaraba Sánchez, que se considera un “jugador físico”, al que le gusta mucho correr. Otra de sus características es la de ser “más penetrador que tirador”.

El último de los nuevos fichajes en presentarse es el elemento de la plantilla 2007-2008 más veterano, pese a que tiene únicamente 27 años. Chema González se formó en el Peleteiro, habiendo militado en el Celso Míguez, Inelga y Mérida. Con 1,87 m. de estatura empezó de escolta y ahora juega de base. “Soy capaz de hacer un poquito de todo: anotar, defender y dirigir al equipo”, se definía el coruñés.

En este acto, el técnico Óscar Lata declaraba que al comienzo de la pretemporada hubo hasta cinco jugadores tocados, pero que ahora ya puede disponer de todos en aceptables condiciones físicas. La principal tarea que quiere llevar a cabo en estos momentos es “hacer grupo” con los baloncestistas a su cargo.

Mañana acabarán las presentaciones del club abulense, con la presencia de los dos norteamericanos Adrian Hill y Chris Gaines y el hispano-argentino Hernán Olaguibe.