Un total de 41 corredores, mayoritariamente de Castilla y León, participaron en la prueba, de 122 kilómetros de recorrido. Aunque desde los primeros compases se produjeron diferentes escarceos, ningún intento de escapada fructificó. Hasta que, a la altura de Bernardos, un grupo de cuatro hombres abrieron hueco. Los cuatro aventureros eran los abulenses Miguel Ángel Candil y Rubén García (Diputación de Ávila), Paul Nabben (Diputación de León - Idea) y Juan Manuel Sánchez (Frío Julymar). La altísima velocidad del grupo, en el que todos colaboraban en los relevos, hizo que uno de sus componentes, Juan Manuel Sánchez, quedara descolgado, hecho que se produjo a la altura de Moraleja de Coca. El trío de supervivientes aguantó unido el resto del recorrido, incluso cuando el viento hizo acto de presencia, por la comarca de Santa María la Real de Nieva, lo que fracturó definitivamente al pelotón.

Al inicio de la Cuesta de los Hoyos, y apoyado por su compañero Rubén García, Candil dio un hachazo al que no pudo responder Paul Nabben, presentándose solo en la línea de meta del Paseo de Ezequiel González. Nabben llegó a siete segundos y García, a 27.

La XVI Vuelta Ciclista a los Pinares Segovianos ejercía como campeonato provincial en las categorías sub 23 y élite. En la primera de ellas ganó Cristian Castro, corredor de Diputación de Ávila, que entró décimo en línea de meta, a 1’33’’ del ganador. Por lo que respecta a la categoría élite, se llevó el trofeo el caucense David Almeida (CCM), quien, a pesar del triunfo, mostró una cierta decepción, puesto que aspiraba a la victoria final y hubo de conformarse con el noveno puesto. Un pinchazo, en las inmediaciones de Moraleja de Coca, impidió al segoviano que pudieran cumplirse sus aspiraciones.