Es casi regla general que cuando un equipo celebra algo, al final termine perdiendo el partido, no sabemos si porque la mente del equipo está pensando más en la conmemoración que en el rival. La cuestión es que el Asisa BM Ávila no pudo concluir la temporada con una victoria ante sus aficionados en el declarado Día del Club. Ni las numerosas paradas de ‘Muro’ Arévalo ni el aliento de los casi 300 espectadores que se dieron cita en el pabellón de San Antonio sirvieron para que el conjunto abulense obtuviera su undécimo triunfo, que le hubiera valido para finalizar séptimo en la tabla, puesto que se adjudicó quien les derrotó en la mañana de hoy: el leonés Santa Bárbara.
El discurrir de los sesenta minutos reglamentarios se caracterizó porque siempre fue por delante el conjunto de Santa Lucía de Gordón, que se presentó en la capital abulense con tan sólo dos jugadores de campo en el banquillo y el portero suplente. El Asisa comparecía con la ausencia del pivote Nacho, además de la del lesionado Carlos García. Una primera mitad en la que progresivamente se fue distanciando el Santa Bárbara hasta llegar a su ecuador con un 7-11 favorable a los visitantes.
Los abulenses no encontraban el sitio adecuado para canalizar su mejor ataque debido a la intensidad defensiva leonesa, que no dudo en emplearse a fondo para impedir la ofensiva local. Hasta cerca del minuto 14 la portería del Asisa estuvo a cargo de Dioni Zaera, siendo sustituido por Arévalo, que nada más saltar a la cancha realizó tres paradas de balones que iban con marchamo de gol. Fue entonces cuando el conjunto de Marco Antonio Rufes se metió con mayor ardor en el partido. Los segundos quince minutos hasta llegar al descanso redujeron la desventaja a tan solo dos tantos y donde el ‘Muro’ se lucía con varias intervenciones de mérito. Antes de la fiesta preparada para el intermedio, el resultado en el descanso era un esperanzador 15-17, totalmente remontable por parte del Asisa.
Tras la reanudación, el equipo abulense cometió varios errores en ataque y presentó un bajón en su juego que facilitó al Santa Bárbara irse de cinco, ayudado también por la perdida de balones en defensa del Asisa. Las acciones de ambos equipos se hicieron más duras y como consecuencia comenzaron a caer las exclusiones. En el segundo tiempo el conjunto local se hizo más pequeño ante su rival y se empecinó en encontrar por el centro la portería contraria cuando el hueco estaba en los extremos, con Fernando Martín –al final del partido declarado el mejor jugador abulense del choque- y Raúl Jimeno, desasistidos.
Los dos jugadores citados tuvieron que marcharse al banquillo al ser excluidos casi a la vez por dos minutos. El electrónico señalaba una diferencia de seis goles favorables a los visitantes, ventaja que se reduciría a cuatro por los abulenses en los últimos diez minutos en una reacción que fue insuficiente para llegar a culminar la remontada, siendo el resultado final de 27-31 para los leoneses.
Con esta derrota, el Asisa BM Ávila termina ocupando la octava plaza en la clasificación final de la Segunda División masculina, grupo territorial único de Castilla y León, con 23 puntos, 10 victorias, 3 empates y 13 derrotas.
Regalos, reconocimientos y camisetas
Al margen del acontecimiento deportivo del partido, el BM Ávila 7 Metros celebró el Día del Club en dos actos. El primero ocurrió en el descanso, cuando los jugadores abulenses lanzaron a los espectadores de las gradas de San Antonio bolsas con golosinas y mochilas. En este intermedio se procedió a la entrega de camisetas enmarcadas a las empresas y entidades patrocinadoras que apoyan al club en su singladura por el balonmano.
La primera en recibir una camiseta fue la concejala de Deportes del Ayuntamiento de Ávila, Patricia Rodríguez, de manos de las jugadoras del equipo juvenil femenino. A continuación, eran los doctores José Carlos Sánchez Marcos y Juan Albert Luque –ex jugador de balonmano en el histórico Atlético de Madrid- quienes recibían para Asisa otra camiseta entregada por el presidente del Ávila 7 Metros, José Jiménez Fraile. Luego sería el entrenador del equipo, Marco Antonio Rufes, quien daba a la imprenta Marcam la camiseta de reconocimiento a su colaboración, para finalmente ser el capitán, Jesús García Arévalo, el que ofrecía la última enmarcación a la clínica Sandra d’Oliveira.
Finalizado el encuentro, los entrenadores de los tres equipos del Ávila 7 Metros recibieron una camiseta como gratitud a su trabajo, antes que la Hermandad de Donantes de Sangres de Ávila entregara un regalo a cada uno de los jugadores de la plantilla del equipo, que correspondió a la Hermandad con una camiseta enmarcada, recogida por su presidente, Jesús Barrera.
Por último, Eduardo Guerra recibió el trofeo al mejor jugador del equipo durante la temporada 2007-2008, que si bien ha concluido oficialmente con la disputa del último partido de liga, el Asisa tiene previsto organizar próximamente su tradicional Torneo de Veteranos.
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