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A partir de hoy 15 de agosto, los amantes del deporte de la escopeta tienen una nueva oportunidad de desarrollar la actividad de la caza menor en la media veda que se abre, limitada a determinadas especies cigenéticas como la codorniz, paloma bravía, paloma torcaz, urraca, grajilla, corneja y zorro. La media veda de la tórtola común no se abrirá hasta el jueves 24 de agosto.
Muchas serán las escopetas y quizá pocas las piezas a cobrar. Armas, munición y perro ya no serán los únicos elementos imprescindibles para el cazador sino que la nueva reglamentación derivada de la Orden Anual de Caza 2005-2006 obliga a llevar un chaleco reflectante.
Los cupos están limitados a 35 codornices y a 8 tórtolas por cazador y día, no siendo recomendable la caza entre las 12 y las 17 horas, aconsejándose la retirada de los perros en aquellas zonas donde se presuma la presencia de pollos.
En la provincia de Ávila, según datos de la Junta de Castilla y León del año 2004, hay un total de 525 cotos donde es posible la caza menor, casi el 10 por ciento del total de la región. Estos cotos ocupan una superficie de 660.778 hectáreas, algo más del 8 por ciento de todo el territorio de caza de la Comunidad. No obstante, la superficie dedicada es la más baja de todas las provincias, a excepción de Segovia que cuenta con 610.997 hectáreas.
Un total de 4.161 licencias de caza han sido otorgadas a los cazadores abulenses, una cifra que se eleva a 142.276 para toda Castilla y León, de las que 98.580 corresponden a las concedidas por los servicios centrales. Ávila únicamente supera a Soria y Segovia en el número de licencias.
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